The China Mail - Última prueba para emigrantes africanos: cruzar de España a Francia

USD -
AED 3.673042
AFN 72.000368
ALL 87.274775
AMD 390.940403
ANG 1.80229
AOA 912.000367
ARS 1137.970104
AUD 1.565349
AWG 1.8
AZN 1.70397
BAM 1.720686
BBD 2.017877
BDT 121.428069
BGN 1.721593
BHD 0.376901
BIF 2930
BMD 1
BND 1.312071
BOB 6.906563
BRL 5.808204
BSD 0.999437
BTN 85.314611
BWP 13.77569
BYN 3.270808
BYR 19600
BZD 2.007496
CAD 1.384165
CDF 2877.000362
CHF 0.81849
CLF 0.025203
CLP 967.160396
CNY 7.30391
CNH 7.30369
COP 4310
CRC 502.269848
CUC 1
CUP 26.5
CVE 97.403894
CZK 22.038604
DJF 177.720393
DKK 6.56557
DOP 60.503884
DZD 132.56604
EGP 51.126904
ERN 15
ETB 133.023649
EUR 0.879325
FJD 2.283704
FKP 0.753159
GBP 0.753835
GEL 2.740391
GGP 0.753159
GHS 15.56039
GIP 0.753159
GMD 71.503851
GNF 8655.503848
GTQ 7.698128
GYD 209.656701
HKD 7.76252
HNL 25.908819
HRK 6.612104
HTG 130.419482
HUF 359.10504
IDR 16862.9
ILS 3.68395
IMP 0.753159
INR 85.377504
IQD 1310
IRR 42125.000352
ISK 127.590386
JEP 0.753159
JMD 157.965583
JOD 0.709304
JPY 142.17104
KES 129.503801
KGS 87.233504
KHR 4015.00035
KMF 433.503794
KPW 899.977001
KRW 1418.390383
KWD 0.30663
KYD 0.832893
KZT 523.173564
LAK 21630.000349
LBP 89600.000349
LKR 298.915224
LRD 199.975039
LSL 18.856894
LTL 2.95274
LVL 0.60489
LYD 5.470381
MAD 9.275039
MDL 17.289555
MGA 4552.892736
MKD 54.091003
MMK 2099.608303
MNT 3548.057033
MOP 7.990393
MRU 39.435529
MUR 45.090378
MVR 15.403739
MWK 1736.000345
MXN 19.72174
MYR 4.407504
MZN 63.905039
NAD 18.856894
NGN 1604.703725
NIO 36.775056
NOK 10.481075
NPR 136.503202
NZD 1.685133
OMR 0.384998
PAB 0.999437
PEN 3.763039
PGK 4.133235
PHP 56.712504
PKR 280.603701
PLN 3.762405
PYG 7999.894426
QAR 3.640604
RON 4.378104
RSD 103.137317
RUB 82.174309
RWF 1415
SAR 3.752237
SBD 8.368347
SCR 14.241693
SDG 600.503676
SEK 9.63369
SGD 1.310745
SHP 0.785843
SLE 22.775038
SLL 20969.483762
SOS 571.503662
SRD 37.15037
STD 20697.981008
SVC 8.745073
SYP 13001.68631
SZL 18.820369
THB 33.347038
TJS 10.733754
TMT 3.5
TND 2.988038
TOP 2.342104
TRY 38.12382
TTD 6.781391
TWD 32.524038
TZS 2687.503631
UAH 41.417687
UGX 3663.55798
UYU 41.913007
UZS 12986.521678
VES 80.85863
VND 25870
VUV 121.398575
WST 2.784098
XAF 577.111964
XAG 0.03066
XAU 0.000301
XCD 2.70255
XDR 0.717698
XOF 575.000332
XPF 102.775037
YER 245.250363
ZAR 18.840363
ZMK 9001.203587
ZMW 28.458439
ZWL 321.999592
Última prueba para emigrantes africanos: cruzar de España a Francia
Última prueba para emigrantes africanos: cruzar de España a Francia

Última prueba para emigrantes africanos: cruzar de España a Francia

"¡Muchachos, tenemos que dispersarnos!". Junior, un marfileño de 20 años, se levanta y rompe el silencio que reina en el tren que une las ciudades fronterizas de Irún, en España, y Hendaya, en Francia.

Tamaño del texto:

En el andén de la estación de Hendaya, patrullan policías franceses. Del grupo de seis migrantes llegados de Costa de Marfil, Mali o Guinea con la idea de ir a Francia, sólo Junior se atreve a bajar del tren.

"No tiene visa, no es posible", le dice uno de los agentes examinando su pasaporte.

Aprovechando que éstos les dan la espalda, los otros cinco miembros del grupo de Junior descienden a las vías. "¡Quédense ahí!", lanza uno de los policías, pero uno de los migrantes sale corriendo y trepa una verja de más de dos metros para perderse corriendo por las calles de Hendaya.

Los demás cambian de opinión cuando la policía se acerca, entregándoles un documento de "denegación de entrada" e invitándoles a tomar el tren de vuelta.

- Un cruce cada vez más peligroso -

La frontera entre España y Francia, entre Irún y Hendaya, en el País Vasco, es el último obstáculo para estos jóvenes migrantes africanos que quieren entrar en Francia a toda costa después de haber cruzado a menudo, como Junior, el océano Atlántico para llegar al archipiélago español de las islas Canarias.

En 2021, el número de personas no admitidas en la frontera por el departamento de Pirineos Atlánticos, donde se encuentra Hendaya, se disparó un 120% con respecto a 2020 (13.164 frente a 5.976), según datos de la prefectura.

Ante el aumento de los controles, los emigrantes se arriesgan cada vez más, según investigadores, asociaciones y políticos locales.

En octubre, tres argelinos fueron arrollados por un tren en Ciboure, a pocos kilómetros de la frontera. Dos marfileños y un guineano se ahogaron el año pasado al intentar cruzar a nado el río Bidasoa, que marca la frontera.

En el puente de Santiago, que franquea este río entre Irún y Hendaya, la policía francesa controla periódicamente los vehículos. El puente para peatones paralelo está cerrado por dos barreras de cerca de tres metros de alto.

Llegado hace menos de 48 horas a Irún, Yakuba sale a fumar frente al centro de acogida temporal de la Cruz Roja donde va a pasar la noche.

La mascarilla de este malí de 20 años no basta para esconder una cicatriz en la nariz, marca de las altas y afiladas alambradas que saltó en junio para entrar en el enclave español de Melilla, en el norte de Marruecos.

"También tengo una en el pie, había mucha sangre", dice este joven, con los ojos enrojecidos por la falta de sueño, que asegura haber huido de Mali por "la guerra".

Después de haber intentado en vano cruzar a Francia por la montaña, en tren o por el puente de Santiago, reveló que estaba considerando tomar un "taxi-mafia" de un contrabandista por "150 euros". Pero finalmente consiguió cruzar el puente unos días después.

- Controles policiales cuestionados -

En el lado francés de la frontera, los efectivos policiales se duplicaron desde el restablecimiento en 2015 de los controles fronterizos tras los atentados de París, según el ministerio de Interior. Cerca de un tercio de los puntos de paso entre España y Francia están cerrados, oficialmente a causa de la pandemia de coronavirus.

"Pero el hecho y la realidad es que los controles que se están llevando a cabo son controles exclusivos a personas negras", denuncia Xabier Legaretta, director de Migración y Asilo del gobierno regional del País Vasco español, acusaciones compartidas por ONG como Amnistía Internacional.

A los inmigrantes "no se les informa de sus derechos" durante los controles, y se les impide "pedir asilo", cuando no es "la labor del policía decidir o no" si pueden hacerlo, denunció por su parte Íker Barbero, profesor de derecho en la Universidad de Bilbao.

Estas prácticas son criticadas por Tom Dubois, un antiguo policía de fronteras de Hendaya que dimitió en 2018 para denunciar "la política de números". "Algunas noches, cuando no devolvíamos a los migrantes, teníamos una notita en la mesa" por parte de la jerarquía, dice este activista de izquierdas, que rescató a dos migrantes en el Bidasoa en 2020.

En el lado español, dos agentes de policía en primera línea en este tema denuncian, bajo anonimato, la indefinición legal en la frontera y se confiesan presos de un "sentimiento de inutilidad" ante el "ping-pong" de inmigrantes deportados por Francia, liberados luego por falta de medios en España, y que acaban probando suerte de nuevo.

- Intentarlo "una y otra vez" -

Estas acusaciones fueron rechazadas de plano por el subprefecto de los Pirineos Atlánticos, Théophile de Lassus.

A los inmigrantes "que optan por volver sin haber solicitado un visado o un permiso de residencia se les pide que den media vuelta", dijo, negando que no se les informe de sus derechos o que se devuelva a menores aislados.

"Las reglas se respetan enteramente. Los derechos se notifican en el auto de la prefectura y todas nuestras decisiones son susceptibles de recurso", sentenció.

Dado que Francia acaba de asumir la presidencia de turno de la UE, Emmanuel Macron quiere reformar el espacio Schengen para poder reforzar los controles migratorios interiores.

Pero esto no desanimará a Junior. "Mi destino es Francia (...) Lo intentaré una y otra vez".

A su lado, Abdul, un marfileño de 24 años, coincide: "No es peor que cruzar el océano (Atlántico), así que no nos vamos a desanimar ahora".

I.Taylor--ThChM--ThChM